La Raza Segureña, que debe su nombre a la sierra y río Segura, comprende animales de formas alargadas, perfil fronto-nasal subconvexo y tamaño medio, con vellón de lana entrefina que se explota principalmente para la producción de carne, proporcionando corderos de alta calidad, con elevados rendimientos en matadero.
Cabeza: De tamaño medio, en armonía con el volumen corporal, se encuentra desprovista de lana. Sin cuernos en ambos sexos. De línea fronto-nasal subconvexa en las hembras y más acentuada en los machos, haciéndose más ostensible a nivel de la región nasal
Cuello: Proporcionado, sin pliegues ni expresión de papada. Con o sin mamellas
Tronco: Largo y profundo. Cruz ligeramente destacada. Línea dorsolumbar preferentemente horizontal. Grupa amplia y ligeramente inclinada
Mamas: De igual tamaño en sus dos partes, globosas y desprovistas de lana.
Extremidades: Bien aplomadas y de longitud en armonía con el desarrollo del cuerpo. Espalda bien unida al tronco. Nalgas y muslos con perfil sub convexo. Carpos, tarsos y radio, finos y fuertes.
Fotografía de José Daniel Palomares Bastida